Podemos ver de frente a un hombre, que sigilosamente, huye de una ciudad o poblado,
llevando con él cinco espadas (tres con el brazo izquierdo; dos, en el
derecho) dejando tras de él otras dos espadas, que permanecen clavadas
en el suelo. Para la mayoría de los tarotistas esta carta está
relacionada con la idea del robo o el plagio, sin
embargo algunos coinciden en señalar que no necesariamente es un robo
para beneficio propio, sino que el protagonista de esta ilustración
puede estar sirviendo de agente a su propio ejército, robando las armas del enemigo.
No obstante –sea para sí mismo o para
beneficiar a su bando- esta carta también hace referencia al huir de la
sociedad, es decir, tomar la decisión de separarse de un grupo de personas o de todo lo conocido,
a fin de vivir en libertad según los preceptos propios. En este caso,
los expertos en simbología ven una analogía entre esta carta, y la
anterior a ella, el Seis de Espada puesto que en esta baraja se realiza un escape o huida por agua, mientras el Siete de Espadas también habla se desplazamientos pero por vía terrestre.
De igual forma, hay también quien advierte sobre la importancia de que el consultante se haga un examen de conciencia
y someta a la luz de la moral las acciones que lo están llevando a
abandonar el espacio conocido hasta ahora, pues de lo contrario pues
estar cayendo en ciertas actitudes no del todo correctas. Igualmente,
los cartománticos, expertos en tarot, han coincidido en señalar que
normalmente este intento de huir o la huida concreta no son acciones que puedan mantenerse en el tiempo,
pues tarde o temprano el consultante deberá volver a dar la cara ante
sus conocidos, sea cual sea el hecho que lo hizo marcharse, por lo que
nunca deberíamos comportarnos en una forma que no nos haga sentir
orgullosos.
¿Qué nos quiere decir este arcano?
El siete de Espadas representa la actuación a espaldas de los demás, la falta de fiabilidad. Engaños, astucia, ocultación, trampa y engaño son otros de los significaddos que acompañana este arcano.
- Su lado positivo es la búsqueda de una solución creativa.
- Su lado negativo es la actuación inadecuada.
En cuanto a los planos concretos de la existencia, el Siete de Espadas cuenta con significados específicos. Por ejemplo, en el ámbito laboral,
esta carta puede estar indicando que al consultante se le pondrá en
bandeja de plata una oportunidad para robar o cometer un acto
fraudulento que le traerá beneficios económicos. No obstante, no puede
olvidar que todo lo que haga se le devolverá, y que de
quedarse corre el riesgo de ser descubierto, por lo que el significado
de esta carta en este plano, recuerda mucho al de la carta Cinco de
Espadas, el cual habla de una victoria que sin embargo no trae felicidad a quien la logra.
Así mismo, sobre todo si el consultante
es dueño de alguna empresa o negocio, la aparición de la carta Siete de
Espadas dentro de una lectura relacionada con lo laboral puede indicar
que alguno de sus empleados o socios está pensando o a punto de cometer un fraude o estafa,
que le traiga pérdidas. Igualmente, la mayoría de los tarotistas
coinciden en señalar que esta carta también puede advertir sobre
situaciones de robo o pérdida de materiales, por lo que se recomienda asegurar la mercancía o bienes
que el consultante tanga, como previsión sobre este anuncio de pérdida o
robo. No obstante, se debe analizar la carta en contexto, para revisar
si las otras cartas pueden dar luz sobre el sitio de donde proviene el
ataque material.
Por su parte el lado amoroso
no cuenta con mejor suerte en presencia del Siete de Espadas, puesto
que su aparición en una consulta de tipo amoroso puede estar indicando
que la pareja del consultante se encuentra en malos pasos con otras compañías.
No obstante, aún no se trata de una infidelidad consumada, sino de un
simple coqueteo. Sin embargo, de no detenerse este juego puede que
termine en algo más serio, que pueda comprometer la relación del
consultante. Igualmente, y por eso se debe analizar la carta en
contexto, el Siete de Espadas puede referirse al hecho de evadir una responsabilidad, como por ejemplo dejar las cargas económicas o domésticas sólo a cargo de la pareja, sin tomar partido.