Podemos ver una escena familiar, que
pareciera desarrollarse en el arco de una ciudad del Medioevo. En ella
podemos ver en primer plano a un anciano, quien parece estar entrando a
la ciudad sin que nadie repare en su presencia, salvo
dos perros blancos, en el fondo un hombre y una mujer que miran hacia
direcciones distintas, mientras un niño pequeño hala la camisa de la
mujer, quien los tarotistas creen que es la madre del infante. Sobre
ellos, como cayendo del cielo, se pueden apreciar diez monedas de oros, cada una de ellas con un pentáculo acuñado sobre ella, como símbolo del elemento Tierra.
El Diez de Oros representa la felicidad familiar,
obtenida gracias a la prosperidad y estabilidad lograda en todos estos
años de lucha. No obstante, los especialistas en simbología también ven
en las señales de esta carta una advertencia, pues el consultante puede
estar tan acostumbrado a tener una buena posición que corre el riesgo
incluso de dejar de verlo como una bendición, y caer en el aburrimiento y la apatía. Es decir, perder la capacidad de disfrutar los regalos que caen del cielo.
Igualmente, hay un sentido en la forma en
que están dispuestas las diez monedas en la ilustración de esta carta.
De acuerdo a lo afirmado por algunos investigadores de símbolos, las
monedas del Diez de Oros del Tarot –en la versión del Tarot Rider- están dibujadas a semejanza del Árbol de la Vida de la cábala, siendo la única carta de todo el tarot que contiene esta figura.
¿Qué nos quiere decir este arcano?
El diez de oros representa la seguridad y la seguridad en el ámbito familiar, especialmente. Realización, riqueza, estabilidad y hoogar son otros de los conceptos que acompañan a este arcano.
- Su lado positivo es el sólido fundamento que trae el éxito.
- Su lado negativo es las perdidas y la supuesta seguridad.
En cuanto a los planos concretos de la existencia, esta carta cuenta también con significados específicos. Por ejemplo en el plano laboral,
esta carta le anuncia al consultante la llegada de una oportunidad
laboral altamente remunerada, que lo hará comenzar a vivir una etapa de bonanza y prosperidad material.
Si por el contrario el consultante se encuentra desempleado esta carta
igualmente le anuncia la llegada de una gran oportunidad laboral que lo
sacará del proceso de recesión económico que vive.
En el plano económico,
el Nueve de Oros viene también con muy buenos mensajes, ya que cuenta
sobre la riqueza, prosperidad y solvencia económica con la que cuenta o
comenzará a contar el consultante. Así mismo esta es la carta de las herencias,
de aquello que pasa de padres a hijos, para dotar de gran estabilidad
material a los últimos. Sin embargo, y por eso -al igual que con todas
las otras cartas del tarot- se debe analizar en contexto, pues en
ocasiones la aparición del Diez de Oros viene a avisarle al consultante
que su capacidad de producir dinero o la riqueza material que posee ha
llegado al tope, es decir que no podrá generar más recursos.
En cuanto a lo emocional
esta carta habla sobre la seguridad y la felicidad. Sin embargo también
advierte sobre la necesidad de ver siempre a la persona, más allá de
los bienes materiales y las situaciones económicas, no sólo porque
centrarse en el dinero hace que la persona pierda la capacidad de ver lo
que realmente importa en la vida, sino porque una vista constante en lo
material va dejando a la psique sin la capacidad de percibir otras energías, apagando así nuestra intuición y dejándonos psíquicamente indefensos.
Para el plano de la salud,
el Diez de Oros también marca un muy buen augurio, pues indica buena
salud, así como la seguridad de que si algo grave ocurriera la persona
cuenta y contará con los recursos necesarios para atender cualquier
contratiempo médico, sin que esto lo lleve a quedar desamparado.
Igualmente, como indican algunos tarotistas, también contará con el
apoyo de su familia. Así mismo es importante resaltar que en esta carta
el significado de bienestar económico está totalmente ligado al plano de la familia.
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