domingo, 11 de diciembre de 2016

Conociendo al arcano menor nueve de oros

odemos ver de frente la figura de una mujer, vestida de amarillo –el color del oro y la riqueza- quien con su brazo izquierdo sostiene un gavilán. Por el paisaje que la rodea se puede inferir que se encuentra en el jardín de una lujosa casa, la cual algunos han llegado a señalar que pertenece a ella, interpretándolo entonces también como un signo de riqueza y prosperidad.
 
A sus pies se pueden ver nueve monedas de oro, cada una de ellas con la inscripción del pentáculo en su centro, el cual representa o comanda sobre el elemento Tierra, al igual que el palo de oros. Sobre una de estas monedas, la mujer posa una de sus manos, en un gesto que para algunos viene a reafirmar su donaire de grandeza sobre las posesiones terrenales que la rodean. Así mismo, casi en la esquina inferior izquierda –a los pies de la mujer- se puede ver un pequeño caracol que avanza sobre el suelo, el cual es tomado por algunos expertos en simbología como un mensaje al consultante que tiene como destino recordarle que aun a paso corto y lento se puede llegar tan lejos como se quiera.  De igual forma este caracol viene a revelar que la mujer protagonista de esta carta no adquirió su poderío y riqueza de un día para otro, sino que fue el resultado de su trabajo, constancia y dedicación.

 
¿Qué nos quiere decir este aracano?
 
En nueve de oros representa el éxito  y la seguridad obtenida por los esfuerzos realizados. Exito, ganacias, abundacia y riquezas son otros de los conceptos que compañan a este arcano.
  • Su lado positivo es la mejora y el cambio favorable. 
  • Su lado negativo es la codicia y la falsas esperanzas. 
En líneas generales, la mayoría de los tarotistas coinciden en señalar que la carta del Nueve de Oros es la carta del éxito, es decir que su presencia en una lectura, sea el plano vivencial que sea, augura buenas nuevas y triunfos. Igualmente, esta carta tiene un significado según el nivel de existencia que se esté revisando. Por ejemplo, en el plano laboral, la aparición de esta carta avisa sobre grandes triunfos, logros y metas cumplidas para el consultante. Así, si la persona está buscando empleo, la presencia del Nueve de Oros le augura la obtención de un muy buen cargo y sueldo. Por el contrario si el consultante ya se desempeña dentro de una labor, la aparición de esta carta le avisa sobre próximos triunfos y victorias, que lo harán subir de posición y proyectarse profesionalmente.

Por su parte el plano económico también se ve muy bien aspectado con la aparición del Nueve de Oros, pues es la carta directamente relacionada al éxito financiero. En este caso la presencia de esta baraja puede estar indicando que el consultante se encuentra próximo a crecer económicamente, así tal vez logra adquirir una vivienda, comprar un carro o ganar suficiente dinero para tener una vida holgada. Igualmente, esta carta anuncia sobre la ayuda financiera que se conseguirá de parte de una mujer noble, de dinero, distinguida por sus modales.

En cuanto al amor el significado de esta carta no es tan positivo como en el plano material, pues su presencia dentro de una consulta amorosa indica que el consultante –tanto si es hombre como mujer- ha dejado de lado sus emociones, por concentrarse en su crecimiento profesional y económico, de esta forma ha pagado con su soledad los triunfos obtenidos en el campo profesional y económico. Esta carta incluso puede señalar la decisión de no tener hijos, a pesar de desearlos, pues todo lo relacionado con pareja, familia e hijos ha quedado atrás. Si el consultante estuviese casado y fuese padre, el Nueve de Oros hablaría entonces del abandono al que ha sometido a su familia por dedicarse nada más que a obtener dinero. Sin embargo, este tipo de situaciones no afectan por completo al consultante, ya que esta carta no marca sufrimientos ni culpas, sólo señala este abandono de lo emocional como una característica del consultante.

En relación con la salud, la aparición del Nueve de Oros habla de un momento de bienestar, acompañado de felicidad, seguridad y una alta autoestima, que viene a manifestarse en un estado de bienestar tanto físico como emocional.

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